A casi un mes de la repentina partida de Alberto Zapata Bacur, en un barrio sanjuanino un grupo solidario fundó un merendero con el nombre del motociclista. Se llama «Vuelta alto, Wey», y asiste a 60 chicos de la Villa Carolina y sus alrededores. Un comedor que nació en medio da la segunda ola de coronavirus y que además de brindarle la merienda a decenas de pibes, le rinde homenaje al piloto sanjuanino que dejó una huella en el deporte motor.
La idea surgió de Abigail, una niña de 12 años que es hija de Johana González, la mujer que recibe a los chicos en su propia casa. A la joven se le ocurrió bautizar al merendero con una frase que identificara a Zapata, el joven que le hizo frente a las adversidades, supo conquistar muchos corazones y encontró la muerte cuando disfrutaba de su gran pasión: el motocross.
«Nos pusimos en contacto con la familia para consultarles si no les molestaba, para que no lo tomen como algo frívolo. Pero la verdad es que les gustó la propuesta y nos dieron el visto bueno. Nosotros arrancamos el sábado pasado, justo cuando el Wey cumplía años. Fue pura casualidad, pero bueno, fue muy lindo porque sentimos que de alguna manera lo estábamos homenajeando», comentó Martín Sassul, uno de sus gestores.
El merendero funciona los martes y jueves desde las 18.30 horas con la clásica merienda, y los sábados, al mediodía, con el almuerzo. En total son 60 niños los que asisten al lugar. Tanto Sassul como González se encargaron de censar a los vecinos y actualmente, son quienes encabezan esta movida solidaria. Es que además de los alimentos, a los chicos se les brinda actividades educativas como clases de apoyo, grupos de lectura, clases de plástica y arte. También hay un especio para la práctica deportiva.
Quienes quieran colaborar con comestibles, artículos de higiene, ropa, artículos escolares, calzados y otros elementos, pueden contactar al merendero a través de la página de Facebook «Vuelta alto, Wey».
Fuente: Tiempo de San Juan.